En la etapa de diseño del sistema de HVAC, el proyectista de termomecánica deberá configurar la Unidad de Tratamiento de Aire que se ajuste a las necesidades particulares del proyecto y condiciones psicrométricas requeridas.

La primera sección de una UTA, que es dónde ingresa el aire para ser tratado, está representada por un módulo de mezcla, seguido de un módulo de filtrado. Esta primera etapa de filtrado sirve para preservar la limpieza de serpentinas de calefacción y refrigeración, y también actúa como etapa de pre filtrado para reducir la carga de suciedad de una etapa posterior de filtrado de mayor eficiencia.

Existen básicamente dos configuraciones para las Unidades de Tratamiento de Aire; las mismas pueden ser del tipo Impelente o Aspirante. La diferencia entre ambas configuraciones tiene que ver con la ubicación del ventilador y las serpentinas de refrigeración dentro de la Unidad de Tratamiento.

En el caso de la configuración de unidades del tipo impelentes, la unidad de ventilación está dispuesta antes de la serpentina de refrigeración, con lo cual el calor generado por el motor de ventilador es absorbido por la serpentina de refrigeración. Esto permite que la temperatura de salida de la UTA sea más baja y puede ser muy útil en casos de que las cargas de calor en la sala sean elevadas, donde el aire de suministro deba ser lo más frío posible.

No se recomienda que una configuración de UTA impelente esté seguida inmediatamente de un conjunto de filtros HEPA, salvo que se tomen precauciones para prevenir el transporte de humedad de la serpentina de refrigeración a los filtros HEPA. Ver Fig. N° 1

La configuración de la Unidad de Tratamiento de Aire debe responder a las particularidades del proyecto, de manera que beneficie al funcionamiento general del sistema.

En el caso de la configuración de unidades del tipo aspirantes, las serpentinas de calefacción y refrigeración están dispuestas antes de la unidad de ventilación, por tal motivo el calor aportado por el motor del ventilador actúa cómo recalentador y reduce la humedad relativa del aire y previene los problemas de que se humedezcan los bancos de filtros HEPA de la UTA.

Con este tipo de configuración si la trampa de drenaje se vacía, es posible que ingrese aire sucio a través de la trampa, impidiendo al mismo tiempo la salida de agua de la bandeja. El diseño de la trampa de condensado de refrigeración debe ser lo suficiente alto para asegurar mantener un tapón hidráulico en la cañería. Ver Fig.N° 2

La configuración de la Unidad de Tratamiento de Aire debe responder a las particularidades del proyecto, de manera que beneficie al funcionamiento general del sistema. 02

Ambas configuraciones tienen sus propias ventajas y desventajas con lo cual el diseño de la misma se tiene que analizar en forma particular.

En cualquiera de los casos, que en la configuración de la UTA se requiera instalar filtros HEPA, se deberá tener en cuenta que desde la salida de la etapa de ventilación, hasta el final de la salida de aire de la UTA estará sometido a una presión elevada como consecuencia de la contrapresión ejercida por los filtros HEPA. Por lo tanto esas secciones da la UTA en particular se deben contar con mayor número de bisagras y cerraduras en sus puertas de acceso  para asegurar el correcto sellado de los burletes.

Es una práctica recomendada someter a los ensayos de estanqueidad a la UTA en fábrica (FAT) y una vez más, cuando la UTA ya esté ubicada en la posición final de operación del cliente (SAT). Estos ensayos se  realizan según normas SMACNA. Los resultados deben estar debidamente documentados, supervisados y aprobados por la dirección de obra.  Estos ensayos forman parte indispensable en la etapa de calificación de la instalación (IQ).